Por Rubén Moreira
La zaga de las ilegalidades cometidas desde la Corte Suprema de Justicia por los magistrados sandinistas durante 2010, fue sellada ayer por sus colegas liberales, con la repartición de cuotas de poder.
Los liberales integraron Corte Plena y sumaron la mayoría necesaria que permitió la conformación de salas, nombramiento de magistrados y de otros cuadros de las estructuras del Poder Judicial.
“La Corte vuelve a su normalidad, y eso es positivo, hicimos todo bajo la Ley” dijo el magistrado Rafael Solís.
“Reconocieron todo”, agregó, en referencia al artículo 201 en su párrafo segundo, y al cuestionado Decreto Presidencial 03-2010, que ratifica en sus cargos a los funcionarios a quienes se les había vencido el período para el que fueron electos.
“La vida sigue avanzando y la Corte sigue marchando… yo cumplí con mi deber”, fue la escueta explicación dada por el liberal Manuel Martínez sobre la integración de los liberales, que permitió se alcanzaran los 12 votos necesarios para el reconocimiento legal del acuerdo de Corte Plena, donde se organiza el Consejo Nacional de Administración y Carrera Judicial, para el nuevo período que llega a su término el 5 de julio de 2012.
Alba Luz Ramos, ratificada como Presidenta de la CSJ, informó que las Salas Constitucional y Penal quedaron nuevamente bajo la tutela de los magistrados sandinistas, en las personas de Francisco Rosales y de Armengol Cuadra, respectivamente.
La Sala Civil será presidida por el magistrado liberal José Antonio Alemán Lacayo, y la de lo Contencioso Administrativo por Damicis Sirias.
De los 28 magistrados de los Tribunales de Apelaciones que aplicaron a ser reelectos en sus cargos mediante la evaluación a su desempeño, 26 fueron aprobados por la comisión evaluadora. Orlando Luques y David Moreno fueron los reprobados.
La Corte Plena, además, nombró magistrados de dedo bajo la figura de “ingreso extraordinario” a Thelma Vanegas Álvarez, en Granada; Indalecio Martín González Jiménez, en Estela; César Augusto Quinto Gómez, en Bluefields, Región Autónoma del Atlántico Sur, y a Iván Escobar Aguilar en Masaya, este último hijo del magistrado Iván Escobar Fornos, quien antes concursó para la elección de magistrados laborales, pero la Comisión de Admisión y Valoración de Méritos de la Corte Suprema de Justicia, no lo consideró elegible.
Otros nuevos magistrados son Néstor Castillo Vanegas, quien se desempeñaba como juez Cuarto de Distrito Civil, y Auxiliadora Alemán Zeas, quien fungía como jueza laboral de Managua. Los Vanegas son sobrinos de Alba Luz Ramos.
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