Luego de 13 años alejada de la televisión, la actriz Graciela Döring regresa a las telenovelas mexicanas con una participación especial en "Ni contigo ni sin ti". En el melodrama, que comenzará a transmitirse este lunes, interpretará a "Felipa" la tía del personaje de Alessandra Rosaldo. "Es una participación especial, soy la tía de ´Julia´, una niña que no tiene padres y vive conmigo”. El debut en televisión de Döring fue como antagonista de Maricruz Olivier en la primera versión de "Teresa", en 1959. "Era la chica rica y buena; Ahora, a tantos años, soy la pobre mala, lo cual me gusta mucho". Subrayó que se alejó de la televisión mexicana para cumplir con otros compromisos. "Estaba en Miami haciendo otras cosas, telenovelas como `Soñar no cuesta nada´ y `Amor comprado´, para Venevisión”. "Ni contigo ni sin ti" es una producción de Mapat y se estrena este lunes por el canal 2 de Televisa; contará la historia de dos parejas: "Leo" (Eduardo Santamarina) y "Nicole" (Laura Carmine), así como "Iker" (Erick Elías) y "Julia" (Alessandra Rosaldo). La actriz recordó cuando inició en la industria de la televisión con Emilio Azcárraga Vidaurreta, "la gente decía que era una locura, que se había creado un elefante blanco y se preguntaba con qué se iban a llenar tantas horas de transmisión". Comentó que su regreso a la pantalla es como volver a empezar. "Regresar ha sido un impacto, porque para empezar ya no conozco a nadie, lo cual por otro lado me resulta atractivo; pues hay muchos jóvenes que la están haciendo muy bien, es gente nueva con la que nunca había trabajado. "Además, he sido muy bien recibida y estoy contenta de ver estas caras nuevas. Es como si estuviera entrando por primera vez al ambiente", comentó. Durante su trayectoria artística, ha participado en más de 40 producciones televisivas y cinematográficas, aunque confesó que siente cierta nostalgia por el teatro. "Me ha tocado ver un brutal descenso en el aspecto cultural de este país. Todo el nivel que alcanzamos después de la Revolución lo hemos perdido ya, es muy triste porque tuve oportunidad de quedarme en Canadá o Francia donde también estuve estudiando y trabajando, pero regresé porque pensaba que México iba por el camino correcto", dijo. Subrayó que tiene 60 años de trayectoria satisfactoria, pero "también dolorosa porque no existe el tipo de teatro que me gustaba”. Ella misma tiene sus propios proyectos de teatro, los que espera lleguen a buen puerto con un poco de tiempo, además de que tiene en mente hacer un libro con todo lo que ha vivido en los escenarios, pero también necesita tiempo para terminarlo. "Aunque a estas alturas ya no espero mucho, soy consciente de que ya las facultades y el tiempo es muy limitado, lo único que realmente espero es poder ver un renacer y que el país retome el camino perdido".
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